El mareo por movimiento produce náuseas, babeo excesivo, vómitos y ocasionalmente otros signos, como falta de apetito durante varias horas después del mareo por movimiento. Los animales pueden bostezar, quejarse y mostrar signos de intranquilidad o temor, o tener diarrea. El mareo se suele observar durante los viajes por tierra, mar o aire, y los signos suelen desaparecer cuando cesa el movimiento del vehículo.
La causa principal del mareo por movimiento se debe a la estimulación del órgano sensorial del oído interno, que tiene conexiones con el centro del vómito en el tronco encefálico. El miedo a los vehículos puede ser un factor contribuyente en perros y gatos, y pueden observarse los signos incluso en un vehículo que no se mueve. Esto ocurre si un perro se ha vuelto precondicionado a una enfermedad asociada con el viaje en un vehículo.
En algunos casos, el mareo puede superarse acostumbrando al animal a realizar viajes. En otros, el tratamiento farmacológico puede ayudar a prevenir el mareo, proporcionar sedación y disminuir el babeo. Estos medicamentos pueden obtenerse de su veterinario e incluyen tranquilizantes, sedantes y productos para disminuir las náuseas y/o los vómitos.
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Consulte también el contenido para veterinarios sobre el mareo por movimiento.
