Lista de verificación del historial de enfermedades de la piel

Cuando lleva a su gato a su veterinario por un problema de la piel, puede ayudar a su veterinario a diagnosticar el problema teniendo información sobre lo siguiente:

  • El motivo de consulta principal: ¿qué le molesta a su gato?

  • La duración del problema.

  • La edad a la que comenzó la enfermedad de la piel. Algunas enfermedades son más comunes en determinadas edades de los animales.

  • La raza. Algunas razas son propensas a enfermedades específicas.

  • Comportamiento del gato, como lamerse, frotarse, rascarse o morderse la piel.

  • Cómo empezó el problema y cómo ha progresado. Por ejemplo, los problemas que empezaron con picor pueden provocar un autotraumatismo que desarrolle heridas o infecciones cutáneas secundarias.

  • El tipo de problemas cutáneos que vio desarrollarse y cuándo.

  • La estación en la que comenzó el problema. Algunas enfermedades de la piel están relacionadas con la estación del año.

  • La zona del cuerpo donde se observó por primera vez el problema.

  • Cualquier tratamiento previo y cómo respondió su gato al tratamiento. Por ejemplo, si su gato no mejora si se le administran antibióticos, esto ayuda a su veterinario a excluir ciertas enfermedades.

  • La presencia de pulgas, garrapatas o ácaros.

  • La salud de otros animales con los que su gato ha estado en contacto.

  • El entorno de su gato. Los cambios en el entorno del animal pueden influir en el desarrollo de ciertas enfermedades de la piel.

  • La presencia de cualquier signo adicional (como aumento de la sed o de la micción, cambio en el apetito o nivel de energía, o aumento del jadeo). La piel puede ser el primer lugar donde se observan los signos de una enfermedad generalizada.